Nietzsche no fue nihilista: fue su antĂ­doto. Su pensamiento no se construyĂł para justificar el vacĂ­o, sino para forjar una nueva espiritualidad sin muletas. Sin embargo, muchos que se dicen discĂ­pulos suyos apenas han leĂ­do AsĂ­ hablĂł Zaratustra, y lo hacen como quien subraya frases de Paulo Coelho: con el entusiasmo de quien no entiende nada pero quiere sonar profundo. Este aforismo señala la comodidad del nihilismo como coartada: ya no hace falta pensar, ni creer, ni sufrir… solo hay que declararlo todo absurdo y sentarse a mirar memes.